Ayer los alumnos de la Univerisad politécnica Virginia Tech, en Blacksburg, Estados Unidos, vivieron una de las peores masacres registradas en un campus universitario del país.
Cho Seung Hui, un joven coreano de 23 años asesinó a 32 personas quienes se encontraban en el campus para luego suicidarse. Pero antes de esto, el joven procedente de Corea del Sur dejó una nota de despedida.
Según la cadena internacional, ABC news el objetivo de esta carta era expresar sus quejas, en las cuales se refiere con desprecio a los “niños ricos”, “los charlatanes mentirosos” y la “degeneración” para luego finalizar con la frase: “Ustedes me obligaron a hacerlo”.
Cho Seung Hui, un joven coreano de 23 años asesinó a 32 personas quienes se encontraban en el campus para luego suicidarse. Pero antes de esto, el joven procedente de Corea del Sur dejó una nota de despedida.
Según la cadena internacional, ABC news el objetivo de esta carta era expresar sus quejas, en las cuales se refiere con desprecio a los “niños ricos”, “los charlatanes mentirosos” y la “degeneración” para luego finalizar con la frase: “Ustedes me obligaron a hacerlo”.
De acuerdo a información publicada por el diario Chicago Tribune, el joven hace un tiempo había dado indicios de no estar bien mentalmente, debido a que había causado un pequeño incendio en la residencia donde duermen los estudiantes, y también había sido acusado de acechar a algunas de sus compañeras.
El joven quien estudiaba una maestría en Inglés, llegó a Estados Unidos en septiembre de 1992 y obtuvo su residencia legal en octubre del 2003.
De acuerdo a la legislación del estado de Virginia, un residente extranjero como Cho Seung Hui no posee impedimentos para adquirir armas, como las que utilizó en esta violenta masacre.
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